Evanescence vuelve con nuevo disco

Aunque luego del disco The open door (2006) muchos pensaron que había llegado el final de su agrupación, tras un proceso de meditación y contrición, Evanescence vuelve con un álbum homónimo, nuevos miembros y una frontgirl que hace rato dejo de ser la reina del drama adolecente. Hablamos con ella.

¿Qué inspiró este nuevo disco?
La vida en general. Estoy casada, y no es que ahora cante sobre lavar los platos y los cuidados del jardín, pero tu perspectiva cambia…eso y las relaciones, las amistades y, honestamente, tener una crisis de identidad general que me llevó a u proceso de preguntarme quien soy y que significa Evanescence para mi. Por eso este nuevo disco es autotitulado, porque habla sobre la relación que tenemos con la banda.  

¿Aún se puede considerar a Evanescence como una banda de metal?

No se. No podría usar una sola palabra, tenemos influencias metaleras que hacen parte de nuestro sonido, pero es una combinación de varias cosas: hay música clásica, rock y hasta soul. En las nueva canciones se puede sentir hasta algo de R&B…

Si, en las voces, canté de la manera que me dió la gana. La primera canción se llama What You Want, porque eso fue lo que hice: lo que quería.

¿Qué hace a Evanescence tan oscuro?

No creo que sea siempre oscuro. Creo que nos ven de una manera muy dramática. Cuando oigo nuestras nuevas canciones, oigo muchas fuerza y esperanza, oigo dolor también, pero lo principal es que son canciones emocionales y dramáticas, y eso sucede porque la banda es mi traje. Evanescence es mi terapia, mi canal de salida para mis sentimientos más fuertes de amor, miedo y tristeza.


¿Cómo es su vida mas allá de la música?



Tengo dos gatos que amo. Tengo un esposo que no es músico y es la persona más dulce del mundo. Me gusta mucho coninar y tengo un sueño lejano de crear un restaurante que abra sus puertas toda la noche. Me gusta pintar y las películas de Hayao Miyazaki. Tengo una casa en Nueva York y me gusta dedicarle tiempo, decorarla y cuidar los jardines.

¿Cuidar los jardines?

Si. Se trata de construir un hogar. He viajado toda mi vida, incluso desde antes de entrar a la banda, ya que mi papa trabajaba en radio y durante mi infancia nos mudábamos mucho. Cuando se publico Fallen yo solo tenía 21 años y seguido visitando nuevos lugares desde entonces. Toda mi vida adulta he sido una visitante. Lo que quiero, extraño y necesito ahora es tener un hogar. Y para volverlo un hogar, quiero hacer todo a mi manera: el jardín, los muebles, las cortinas, las paredes.

Usted habla de su música como un canal para expresar sus sentimientos mas íntimos. ¿No es peligroso entregarse tanto al público?

Es una bonita pregunta, aprecio que lo veas. Es difícil pero a la vez es muy bueno. Se siente muy bien poder sacar esos sentimientos porque la gente se conecta contigo. Nuestros fans son muy apasionados y creo que eso pasa porque nuestra música es muy honesta. Pero a la vez es duro abrirse tanto, porque también te expones a muchas críticas y permites que millones de personas oigan tus cosas más profundas. Aunque da mucho miedo, al final siento que vale la pena.

Fuente: Revista Shock / Colombia EvColombia